TRANSFRONTERIZA 2024
Un año mas (y van 3), acudimos a la prueba que «cruza fronteras» para hacer de la ralla entre España y Portugal, un desafío.
Trail&Bike Transfronteriza.
La prueba zamorana, ya consolidada en el calendario de pruebas de MounTime, se emplaza nuevamente en Figueruela de Abajo, para este año, hacer todas sus pruebas circulares y facilitar a organización, participantes y otros añadidos o familiares.
Como cada año, íbamos a disputar la prueba más larga (31,5 km’s) y 2.400 metros acumulados de desnivel, que este año sufría alguna variación en el circuito, para adecuarla a mejoras en el seguimiento, avituallamientos y hacerla si cabe (y para el sufrimiento de muchos de nosotros) muy muy muy rápida …
Para mí, como he dicho en cada edición, es ilusionante desplazarme hasta la comarca de Aliste (Zamora), tierra de mis padres y abuelos, la cuál ha visto como durante 42 años he ido creciendo en sus deseados y cálidos veranos de Río, bicicleta, verbenas y recuerdos inolvidables …
La prueba Trail, que como viene siendo costumbre se celebra el domingo (este año ante un contenido, meteorológicamente hablando, día veraniego de Junio) tendría un poco de todo: Calor el sábado por la mañana, lluvia por la tarde y noche, nubes el domingo, buen tiempo generalizado y mucha mucha humedad …
El sábado, se celebra la prueba de Bike, que para quien lo desea, puedo simultanearla con la Trail del domingo (valientes)…
Sobre las 8:30 estábamos pisoteando la hierba del arco de salida, dispuestos a prepararnos para esta nueva edición, en la que por variar un poco, íbamos de defender los colores de PORTUGAL. ¡VAMOS CARALHO!….
Al otro lado, el vencedor del curso pasado, Marco Ratón defendiendo la roja. Marco, corredor consagradísimo en la provincia, el cuál acumula la gran mayoría de victorias de la misma y que en el ámbito del atletismo, no tiene rival.
La salida, se contempla rápida y más, teniendo en cuenta que a penas subir a Figueruela de Arriba, emprenderemos el camino que nos conducirá hacia el arroyo Cabrón, a tocar de Villarino Manzanas…
3, 2, 1 …. ¡SALIDAAAAA!…
Como decía, nada más salir, emprendemos la subida por la calle principal hacia Figueruela de Arriba. Cruzar su carretera, y junto a la Robla, adentrarnos en la montaña (medio natural y deseado por todos nosotros):
En seguida, comenzamos ese descenso (a penas transcurridos el primer km), y varios corredores se lanzan desbocados, cuál final de carrera se tratara… Entre ellos, Marco, que este año ha decidido tomar la delantera desde el inicio de la carrera, sin guardar nada.
(Misma estrategia decidió el menda en 2023, sin los resultados esperados, ya que «el motor dijo basta» en el alto del puerto).
Estos primeros 5,5 km’s, son un «downhill» por pista, los cuáles se pueden hacer a toda la velocidad que uno quiera. Mi decisión, es ser cauto y reservar, ya que la humedad es latente y puede hacernos pagar caro el atrevimiento excesivo de origen.
En seguida llegamos al «punto de inflexión» del km 5,5, a penas a unos metros de las pedanías de Villarino Manzanas.
Este año, han eliminado el paso por los infiernos (para mi, el paso más bonito de la prueba), pero aún así, tenemos tiempo de pisar «agua» al paso por este arroyo Melendreras, el cuál va bien cargado, debido a las lluvias intensas y prolongadas caídas durante todo el invierno y primavera.
Justo aquí, es cuando decido y me siento con el ánimo de cambiar el ritmo y avanzar a los 3 corredores que me preceden en apenas 15 metros. Del 9º puesto, paso al 6º (según me dicen). Me lo tomo con calma …
A través del arroyo, vamos transitando hacia una pista que nos conducirá al 1er avituallamiento.
Es el punto Av. 1 (km 8,7), transcurro en 6ª posición, no obstante, con vistas a los corredores que me preceden y que se habían lanzado en la primera bajada del recorrido. Al que no tengo controlado es a Marco, que por lo visto, ha decidido meter la directa sin titubeos.
Cargo Tailwind tomo un gel 226, como viene siendo habitual tras aproximadamente 1 hora de carrera. Soy el único en parar, lo cuál hace que me atrape un viejo Rockero de este deporte por estas tierras, Jose Juan Clemente.
Junto a él y a otro corredor, emprendemos lo que será una pista abierta y «poco atractiva», todo sea dicho, hacia el puerto y 2º avituallamiento. En este transcurrir, cogemos a 3 corredores más, por lo que me coloco 3º y a ratos 2º clasificado, ya sólo con Marco por delante, al cuál, divisamos justo antes de llegar a ese Av.2
Entre el AV. 1 y el AV.2 hay unos 5 km’s aproximadamente (para mi gusto, excesivamente juntos), pero dado el calor de otros años, la organización ha decidido curarse en salud.
Encaramamos la Cobacha del Portillón en solitario, distanciándome unos metros, para tras un breve descenso llegar a este km. 13,3 (AV.2) del mirador del Águila. Cargo de agua (relleno el bidón) sin perder tiempo, y cojo algo de fruta … Me vuelven a atrapar Clemente y otro corredor, pero nada más salir de este punto «intermedio» de carrera, meto la directa encontrándome bastante a gusto, dispuesto a dar caza a los corredores que van por delante, por lo que en seguida me distancio de ellos.
Es el ascenso a Peña Mira (1.241 metros).
Tras coronar «el sierro», empezamos el descenso hacia flechas ya sin guardar nada y abriendo (presumiblemente hueco) con mis predecesores … Por delante, 15 km’s (5 hasta Flechas y AV.3), en el que nos jugaríamos el todo por el todo.
Este descenso a Flechas es muy rápido, pisando sendero únicamente a la entrada del pueblo, por lo que la pista que lo precede te permita abrir gas a todo lo que el cuerpo permita.
Llego al Av.3 (Flechas) en solitario con 2′ de diferencia sobre el primer corredor, por lo que cargo una nueva dosis de Tailwind todo lo rápido que puedo, y me voy sin perder más tiempo.
Viene un terreno «complicado» que el año pasado me las hizo pasar p*****
Por el Arroyo del Cabrón, vamos «sinuosamente» haciendo algún que otro tobobán por pista, hasta llegar al puente del Picón (Av. 4) en el que ya nos entrelazamos con corredores de las otras distancias.
Queda la subida a Figueruela en el que echaremos el resto, para ver si «suena la flauta» de encontrarnos a un Marco fundido y diambulando en este tramo final …
La flauta no suena, y encaramamos los metros finales desde el alto, hacia el descenso a meta, entrando en ella como 2º clasificado con un crono final de 2h 31′ 04″….
Nano López
Activador Emocional
Formador de Habilidades Sociales
y Deportista de Carreras por Montaña