LAS ETAPAS DEL DUELO.

 

¿Que es el duelo y qué fases tiene?

 

Cuando sufrimos una pérdida (de un ser querido, de una pareja, de un trabajo, etc …) comenzamos un período denominado Duelo, y es crucial pasarla en todas y cada una de sus fases.
Intentaré explicarlas de la manera más entendible posible.

 

Negación
La primera fase, es la negación. No aceptar lo que nos acaba de ocurrir es algo muy común y puede producirse de forma consciente o inconsciente.
Actuar con el clásico «esto no puede estar pasándome a mi» no hace otra cosa que demostrarte el punto en el que estás.
Digamos que nos «auto protegemos» tras el shock inicial por la noticia recibida. Dependiendo de cada persona, esta es una etapa que puede durar más o menos y actuar o afectarnos de diferente manera.

 

 

Como todas y cada una de ellas, es una fase imprescindible en el progreso adecuado tras el impacto emocional. No obstante, quedarse mucho tiempo en este capítulo, puede producirnos malestar no sólo psíquico, sino también físico, con dolencias o enfermedades de diferentes tipos.

 

 

 

Enfado o Ira
Tras la negación, llega el momento del «darse cuenta» y expresar la rabia que hemos contenido en la primera fase.
A veces, concurre hacia la persona que produjo la situación. Otras en cambio hacia uno mismo, creando auto culpabilidades absurdas o preguntas sin respuesta.
La cuestión es que en la fase del enfado o la ira, creamos una «segunda coraza» de protección absolutamente necesaria para seguir avanzando, ya que tenemos que ‘agarrarnos’ a algo,,, algo en lo que creer.

 

Como se suele decir, necesitamos ‘culpables’ en todo tipo de resquebrajamiento emocional, y en este sentido, nos ayuda a avanzar al siguiente nivel, el hacer cosas tales como: ejercicio físico, meditación y/o escribir una carta explicando aquello que sentimos.

 

 

Al igual que la primera fase, el enfado ha de durar lo que necesitemos para vaciar esos sentimientos tóxicos que hemos acumulado, pero no extendernos en él, para evitar crear bases dañinas hacia nosotros mismos.

 

Negociación
Es aquí, donde dando cuenta de lo que hemos vivido, y tras volcar nuestras iras (justificadas o no), intentamos buscar explicaciones para aceptar que lo que ha ocurrido, «ha pasado y punto».
¿Contradictorio?, quizá, pero en sí, todas las fases del duelo, tienen una parte de contradicción, ya que ninguna responde a una lógica de funcionamiento coherente y/o apetecible.
El pensar «qué cosas hice mal» o «me gustaría volver atrás para quizá…» es frecuente, y se suelen buscar justificación al ‘por qué’ ha ocurrido lo que ha ocurrido.

 

 

Esta fase, no suele durar demasiado, y buscamos refugio en personas que nos ayuden a superarla, antes de saltar a la 4ª etapa.
Negociar con uno mismo, va a depender mucho de nuestra Autoestima, ya que no podemos permitirnos dudar de nosotros mismos ¡ni un instante!.

 

La Tristeza
Aquí, exponemos nuestros sentimientos mas sinceros y seguramente buscamos el refugio social, perdiendo el apetito de vernos con otras personas o el de hacer planes.
Podríamos decir que es el inicio de la aceptación, ya que comienzas a visualizar el futuro con preguntas tan clásicas como ¿y ahora qué? … o ¿qué sentido tiene …?.

 

 

La tristeza va y viene. De repente te sientes muy bien, respaldado por situaciones sociales, distracciones varias, descubrimientos y estados de ánimo fluctuantes, como que sin aviso previo aparecen de nuevo los ‘fantasmas’ en forma de bofetón emocional.
Esta ‘montaña rusa’ de emociones, es lógica y no queda otra que pasarla, obviamente, exteriorizando aquello que sientes de forma natural, por el bien físico y emocional (como ya hemos comentado en otra entrada).

 

Superación
Una vez pasadas las fases anteriores, llega el momento de aceptar y sobretodo, SUPERAR el duelo.
Nuestro día a día, nos ayuda ¡y mucho!. Entendemos que lo que ‘hemos perdido’, es real y que seremos capaces de seguir sin ello.
No tenemos tantos ‘fantasmas’ que nos persiguen en esas noches de insomnio aleatorio, y somos capaces de asentar nuevas bases en nuestro día a día. ¡Comenzamos a construir!

 

 

Es muy probable que comiences a «minimizar» impactos pasados o a ver situaciones, personas o momentos, desde otra perspectiva diferente a como lo veías «entonces». Esto es un claro indicativo de superación.
A veces, no somos capaces de ver las cosas desde otro punto de vista que el de la 1ª persona (el cual vivimos), pero cuando pasa el tiempo adquirimos un nuevo foco, el cuál nos permite obtener respuestas, para cerrar una etapa del duelo, superada fase a fase.

 

 

 

Nano López
Activador Emocional
Formador de Habilidades Sociales
y Deportista de Carreras por Montaña

 

 

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